Fuente : HLRN Urgent actions database
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El año 2023 empieza con dificultades para las poblaciones de Duala, capital comercial de Camerún. Cerca de 500 habitantes del barrio del Valle del Bessengue de Douala vieron cómo las autoridades del distrito de WOURI arrasaban sus casas de más de 500m2 (2) el pasado 5 de enero (1). Las familias pasaron las noches siguientes bajo las estrellas, tras el desalojo de un centenar de construcciones consideradas ilegales.
Cabe señalar que, ya en 2022, las autoridades destruyeron 5.000 casas en el barrio de Bessengue. En ese momento, los jefes tradicionales sawa de Wouri habían solicitado sin éxito a las autoridades medidas de apoyo. E incluso ya en noviembre de 2011, en el barrio de Bessengue, una treintena de familias habían sido amenazadas de desalojo.
Una vez más, la serie de observaciones y recomendaciones del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de las Naciones Unidas no han disuadido la continua oleada de desalojos en Camerún; y ahora es Douala, la capital económica, la que está en el punto de mira.
Las víctimas
Cientos de familias se quedaron sin hogar tras esta operación de demolición en el valle del Bessengue. Suponiendo que una familia normal esté formada por 4-5 miembros, el número exacto asciende a 400 ó 500 personas. Las víctimas son en su mayoría vendedores ambulantes, comerciantes, peluqueros, trabajadores con ingresos insignificantes y medios, familias con niños que aún van a la escuela, jóvenes e incluso ancianos. En esta segunda ronda de destrucción, la policía tuvo que utilizar gases lacrimógenos para dispersar a los jóvenes enfurecidos. Un joven resultó herido de bala. Por el momento, estas víctimas no tienen ninguna garantía de obtener un alojamiento alternativo, y mucho menos una indemnización alternativa. Así es como, desde el 5 de enero de 2023, muchas familias se encuentran sumidas en la angustia y la desolación. Mientras tanto, las autoridades han permanecido evasivas, cuando no en silencio, sobre la cuestión.
Figura 1 : Residentes del Valle del Berrengue en proceso de desalojo con las pocas pertenencias que pueden llevar. Fuente: ACTU Camerún.